(no) fue lo correcto


tenía un mar de ilusiones que se perdió como ola que entra en la arena: mi vida era llena y no había lugar para otra cosa que no fuera construir nuestro Castillo. Todos los días pasábamos horas en el y cada vez eramos más ambiciosos con su diseño, ¡Que hermoso nos quedaba!. Cuando alguna marejada le afectaba, no descansábamos hasta volver a construirlo... nunca le tuvimos miedo al mar, el que fuera más grande que nosotros solo nos llenaba de pasión y rebeldía.
Pero el mar nunca se cansaba pero mi rebeldía si -"no importa, mañana lo arreglaré, solo debo esperar a que baje la marea"- sin darme cuenta el Castillo se había desmoronado y atrapada en sus paredes se llevó a su reina.
Aquel día la luna brilló más fuerte que nunca mostrando al desnudo la soledad, todo había cambiado para siempre.

Sin ti hoy no sabría reconstruirlo,
me rindo, lo siento




Familia y Educación

Publicado por Nicolás Vallejos en Contexto Jóven de Diario Financiero

“Nuestro sistema no da una educación de calidad…este es el verdadero y mayor escándalo de la sociedad chilena, del cual se ha hablado mucho para denunciarlo, pero se ha hecho poco para corregirlo”. Con estas acertadas palabras en su cuenta anual, el Presidente de la República, Sebastián Piñera, comenzó a hacer mención y a detallar parte de las 15 propuestas que se plantearon para corregir este gravísimo problema.

Como movimiento estamos muy contentos con las propuestas anunciadas: creemos que si son implementadas correctamente, comenzarán a producir los cambios que tanto hemos esperado y por tanto tiempo. Pero estamos conscientes que no basta con el esfuerzo de gobierno, pues un buen sistema educativo requiere la participación activa de la comunidad y específicamente de los más cercanos: la Familia.

En el mejor modelo educativo a nivel mundial, el finlandés, la familia es considerada uno de los ejes centrales de sus resultados. En ella los estudiantes son corregidos y formados rigurosamente, pero también acogidos y motivados con entusiasmo cuando caen. Esto no debe confundirse con el capital cultural que se transmite al alumno, pues este es un capital emocional para el cual no se requieren conocimientos formales ni recursos económicos.

En Chile, hay iniciativas que buscan fomentar este capital emocional. Las encontramos en varios colegios particulares y emblemáticos, entre ellos el Instituto Nacional. Allí se denomina “Escuela para Apoderados” y busca suplir las falencias que pudieran tener los apoderados y alinearlos con el objetivo de la escuela. Así se logra que los docentes logren hacer sinergia con quien es responsable del alumno (padres, abuelos o tíos) y, como vemos en los resultados, estos mejoran considerablemente.

Medidas simples como ésta podrían mejorar la calidad educacional considerablemente. Debemos ser creativos y eficaces y siempre recordar que nuestro objetivo no es ganar más puntos para el gobierno de turno o subir en los rankings internacionales. Nuestro objetivo es superar la pobreza a través de una educación de calidad que reduzca las desigualdades y que nos permita llegar al desarrollo.